- no me alcanza la vida aún, para pintar tus colores en un lienzo. Mariposa.
-A veces temo que de mi no tengas nada para recordar, teniendo yo de ti tanto. Dragona
- no voy a regresar.
No realmente, nunca tan cerca, siempre medio esquivo, en realidad bien alejada del punto.
Nunca suficiente, siempre equivocada. Este no es el ángulo desde el cual debería tomar la desición.
Mal desde la raíz, atrapada en patrones invisibles, muy evidentes para el ojo ajeno.
No. No logro sanar la herida, no logro dejar de repetir otra vez y otra más el mismo error de mil maneras distintas.
No hay reconocimiento al esfuerzo, parece que no existiera.
No logro ver la segunda vuelta de la tuerca.
Y tengo miedos irracionales.
Me quieres? Me quieres todavía?
Cuando estás molesta, aún me quieres?
No lo estoy logrando, creo que te alejo cada día, así como a todos los demás amores que tengo en el mundo, menos mi gato.
No entiendo, ese es el problema. Lo intento, trato, doblo aquí, pliego allá. No hay papel que soporte tanto. Más de 7 veces sobre si mismo es imposible.
Quiero resolverlo, siempre quiero resolverlo.
Pero ya está. Por más que pienso que sí, por más que creo que estoy allí, no. No. No
No se cuidar. No se cuidar. No se cuidar.
No quiero descuidar y sin embargo allí estamos nuevamente, en un LOOP.
Callo, para no decir cosas de las que no tengo todo el control, para no gruñir en defensa propia, para no ladrar palabras sin sentido, para poder encontrar la pregunta correcta, la respuesta adecuada, para no quebrar un diálogo en mil.
Pero el silencio tan ensordecedor como es también es una bomba.
No busco, no encuentro, busco y no encuentro.
Cien vueltas al mismo bosque y aún no sé dónde estoy de pie.
De cabeza y con dolor de estómago, con heridas abiertas, con incertidumbres que son certeza. A ciegas, a pleno día. Supongo nuevamente por la conclusión lógica al ser esto una repetición.
El problema soy yo