visitas

sábado, 27 de mayo de 2023

Recuerda otros nidos.
No sobrevivió a la lluvia mata pajaritos, no supo si ya podía o no volar, no lo intenta aún.
El nido está roto, un mirlo puso su huevo en el lugar.

El latido del corazón que lo mantiene tiene otro ritmo, los chincoles ya no pueden más, vibran de tanta revolución por minuto.

Se relata en reversa y no tiene sentido de la orientación, soltó hace un rato la idea de permanencia y no conoce el sentido de pertenencia.

Sus plumas son diferentes, el viento las sacude igualmente.

Todas las noches son iguales a sus ojos.

Se cierra. Imita cantos y formas de relatar. Anda de los apegos evitativos y no te piensa contar nada más.

No hay comentarios:

Publicar un comentario